domingo, 7 de octubre de 2012

¡ATENCIÓN PASTORAL!

¡ATENCIÓN PASTORAL!

GÁLATAS 4: 12-15

INTRODUCCIÓN: A la luz de este pasaje bíblico estudiaremos la “ATENCIÓN” (el cuidado) que la iglesia debe darle, brindarle u ofrecerle al PASTOR que Dios ha escogido para apacentarlos; sobre todo en sus tiempos de crisis y dificultades físicas, materiales, espirituales, ministeriales o de cualquier otra índole. Para esto tomaremos como ejemplo la “ATENCIÓN” (el cuidado) que los Gálatas le ofrecieron, brindaron y dieron al apóstol Pablo en Galacia estando quebrantado de salud (enfermo). Veámoslo de la siguiente manera.
1. LA SITUACIÓN DEL APÓSTOL PABLO EN GALACIA
A. UNA ENFERMEDAD DEL CUERPO (Vr. 13): Se trataba de una enfermedad que sufría (DHH), física (BA), corporal (otra traducción), debilidad de la carne (literal) o simplemente una enfermedad: estaba enfermo (PDT). Esto no en sentido negativo ni malo, sino para resaltar e indicar la situación física maltratada, quebrantada del apóstol; como también para hablar de su débil presencia corporal o pobre estado físico en ese momento (2 Corintios 1: 17; 2: 3; 10: 10).
  • Al principio Pablo no especifica el tipo de enfermedad que tenía
  • Le sucedió tal vez al inicio de su llegada a la provincia de Galacia
  • En el primer viaje misionero: la primera vez que estuvo en Galacia predicándoles el Evangelio (Hechos 13: 14-14: 23; Gálatas 4: 13)
  • Cuando tenía cuarenta y seis años aproximadamente.
B. LA PRUEBA QUE TENÍA EN EL CUERPO (Vr. 14): Prueba (gr. Peirasmos): poner a prueba por experimento, experiencia del mal, examinar, disciplinar, adversidad; esto descarta el concepto equivocado y errado de algunos que piensan que la prueba es lo mismo que castigo divino. Es Dios quien tiene la capacidad y el poder para probarnos así como se explicó anteriormente (en sentido positivo) (Génesis 22: 1; Éxodo 15: 25; 20: 20; Deuteronomio 8: 2, 16; 13: 3; 2 Crónicas 32: 31; Salmos 11: 5; 139: 23; Hebreos 11: 17). En sentido negativo significa tentación lo que hace Satanás (Génesis 3: 1; 1 Crónicas 21: 1-30; Mateo 4: 1-11) y nuestra propia concupiscencia; porque Dios no tienta a nadie (Santiago 1: 12-15).
  • Era una referencia a su enfermedad del cuerpo (vr. 13)
  • Era una prueba ( molestia) para los Gálatas (vr. 14) (DHH)
  • Era una referencia al estado físico de huido y maltratado en que venía Pablo y en el que había motivo para escandalizarse por parte de los gálatas (exegeta Leal).
El propósito divino era tal vez probar, ver, calificar la actitud, la reacción, el comportamiento y la iniciativa de los Gálatas por el apóstol Pablo en medio de la enfermedad física que tenía. De hecho pasaron el examen como lo veremos más adelante (vr. 12-15).
C. UN PROBLEMA EN LOS OJOS (Vr. 15): Algunos exégetas como Romsay, Prat el Jesuita hablan de otras clases de problemas y enfermedades como la malaria, paludismo o epilepsia. Sin embargo; la enfermedad en los ojos (vr. 15) es la connotación más acertada, confiable y el mismo Pablo lo confirma más adelante cuando dijo: “MIRAD CON CUÁN GRANDES LETRAS OS ESCRIBO DE MI PROPIA MANO” (GÁLATAS 6: 11). Generalmente en la época las personas que sufrían de vista escribían con letras grandes y también lo hacían para resaltar y darle énfasis a lo escrito.
  • Hay quienes creen que se trababa de un recrudecimiento de la oftalmía crónica que Pablo padecía
  • Algunos piensan que se trababa de una conjuntivitis aguda, crónica y contagiosa
  • Otros creen que se trataba de una oftalmía aguda o crónica
  • Ciertos comentaristas opinan que se trataba de una enfermedad ocular (ojos) llamada “tracoma” de origen vírico que produce una conjuntivitis granulosa. Lo cierto es que la enfermedad en los ojos quizás se relacione a lo que el mismo Pablo llama “el aguijón en mi carne” (2 Corintios 12: 7-10) (gr. Skolops).
El “aguijón” era una especie de espina, punta, púa y en sentido figurado significa fastidio, dolor, aflicción, dificultad, sufrimiento, gran consternación, discapacidad corporal, experiencia dolorosa, recurrente e intensa. Lo único cierto es, que se trataba de una enfermedad en la vista muy dolorosa, infecciosa, contagiosa, que le daba un aspecto repulsivo, y repugnante que afligía a cualquier persona al verlo; por tiempo su apariencia era muy desconcertante, ojos supurantes (materia), que lo dejaban sin atractivo físico y desfiguraba su rostro.
De esto aprendemos que los creyentes fieles que hacen la voluntad de Dios y permanecen en el servicio cristiano no están inmunes o exceptos a la mala salud, dolores corporales ni debilidades físicas (enfermedad) (2 Reyes 20: 1-7; Job 2: 7-13; Isaías 38: 1-22; Juan 11: 1-4). Tal vez la enfermedad física de Pablo se trataba por lo siguiente:
  • Como consecuencia del deslumbramiento sufrido cerca de Damasco (Hechos 9:1-9)
  • Después de una predicación al aire libre en Antioquía de Pisidia: primera ciudad de Galacia (Hechos 13: 42-58). Situadas a más de mil kilómetros sobre el nivel del Mar
  • Después de haber sido apedreado en Listra: la tercera ciudad de Galacia (Hechos 14: 8-20). Allí lo sacaron casi muerto; pero los discípulos lo RODEARON, se levantó y siguió con Bernabé para un lugar llamado Derbe (Hechos 14: 19, 20).
¿Estamos dispuestos a “RODEAR” a nuestros pastores en todo, aun en los momentos difíciles para que se levanten y sigan haciendo la obra que el señor les ha encomendado? El termino griego es “kuklóo” que significa estar cerca, juntarse al rededor, rodear en círculo todo alrededor, reunirse alrededor. Figuradamente significa apoyar, ayudar.
Lo cierto es que el apóstol Pablo debido a su enfermedad en la vista prolongó su estadía en Galacia: se quedó un buen tiempo en este lugar (dos años) anunciando por primera vez el evangelio y la Palabra de Dios (vr. 13) (Hechos 13: 32, 44, 49; 14: 21), respaldado totalmente por parte de Dios en señales, milagros, fundó varias iglesias: Antioquía, Iconio, Listra y Derbe (Hechos 14: 20, 21). Además a pesar de su tremenda enfermedad en los ojos los Gálatas en vez de rechazarlo lo recibieron al igual que su mensaje con profundo agradecimiento y entera sumisión así como al final lo estudiaremos.
2. LA ACTITUD DE LOS GÁLATAS HACIA EL APÓSTOL PABLO
A. NO LE HICIERON NINGÚN AGRAVIO (Vr. 12): (Gr. Adikeo): causar daño (DHH), ofender (NVI), hacer mal (PDT), injusticia, (no fueron injustos), agravio (BA), maltratar, maltrato.
B. NO LO DESPRECIARON (Vr. 14a): (Gr. Exouudseneo): tratar con desprecio (NVI), desdén, desaire, menosprecio, indiferencia, desestimar, tener menos o en poco, abandono, desatención, reducir por completo a nada.
C. NO LO DESECHARON (Vr. 14a): (Gr. Exptúo): rechazar (DHH), tratar con desdén (NVI), sentir asco (otra traducción), desaire, despego que denota menosprecio, desechar, desdeñar, rechazar. La traducción literal hace alusión a la costumbre de escupir en dirección a un epiléptico (rechazar): era costumbre escupir al ver a alguien sufriendo un mal terrible, ya que se creía que así se evitaba la mala suerte.
D. LO RECIBIERON (Vr. 14b): (Gr. Dejomai): aceptar, acoger, recibir, tratar, tomar, hospedar, hacerse cargo, atenderlo. Los gálatas literalmente se encargaron de su apóstol, padre espiritual y fundador de la iglesia en Galacia, lo curaban, limpiaban sus ojos supurantes, lo atendieron, estuvieron pendientes de Él, suplieron para sus necesidades en esos momentos de enfermedad y mucho más.
  • Como a un ángel de Dios: como si él fuera un ángel del Señor (PDT), como a un mensajero de Dios (otra traducción).
  • Como a Cristo Jesús: como si se tratara del mismo Cristo Jesús en persona (NVI), como si él fuera Jesucristo mismo (PDT). Realmente lo trataron, atendieron como un embajador del cielo, de Cristo (Mateo 10: 40-42; Lucas 10: 16; 2 Corintios 5: 20).
Los gálatas no se detuvieron a ver, mirar, contemplar u observar los defectos físicos de Pablo: ojos supurantes, nariz fileña, cejas frondosas, pies arqueados. Al contrario vieron en él un ángel de Dios y al mismo Cristo Jesús (vr. 14). De veras quien se reflejaba y vivía en el apóstol Pablo era Jesucristo: “…YA NO VIVO YO, MÁS CRISTO VIVE EN MÍ…” (Gálatas 2: 20).
E. ESTABAN LISTOS A SACARSE SUS PROPIOS OJOS PARA DÁRSELOS (Vr. 15): Sacar (Gr. Exorússo): remover, quitar, arrancar, extraer. Este lenguaje o expresión es una hipérbole, una expresión proverbial que en la antigüedad se tomaba metafóricamente para dar a entender que una persona estaba dispuesta a desprenderse de todo lo que fuese necesario para aliviar una necesidad ajena; igualmente indicaba disposición a deshacerse de todo lo que más apreciaban para beneficio de los demás.
  • Los gálatas estaban dispuestos a deshacerse de todo lo que más apreciaban para beneficiarlo a él. Esta fue misma iniciativa en los tiempos de Jesús, cuando perforaron el techo para que fuera sanado por el hijo de Dios (Marcos 2: 3, 4, 11, 12)
  • Esta iniciativa y decisión demostraba el amor, afecto, cariño, respeto, aprecio y valor que los gálatas tenían y sentían por Pablo: su líder, apóstol, padre espiritual, mentor, pastor.
Pablo también les demostró amor, afecto, aprecio, cariño, gratitud a los gálatas llamándolos “HIJITOS MÍOS” (Vr. 19), deseando estar con ellos al instante (vr. 20), animándolos a estar firmes (Gálatas 5: 1), llamándolos hermanos (Gálatas 6: 1, 2), volviéndolos a visitar en el segundo viaje misionero para fortalecerlos y animarlos a perseverar en la fe (Hechos 14: 21, 22).
  • Pablo daba testimonio (testificaba) de esta iniciativa, actitud generosa, sacrificial de los gálatas y por este comportamiento estupendo hacia él: “PORQUE OS DOY TESTIMONIO DE QUE SI HUBIESEIS PODIDO, OS HUBIERA SACADO VUESTROS PROPIOS OJOS PARA DÁRMELOS” (Vr. 15b).
Testimonio (gr. Martureo): decir (hablar) a favor de ellos (DHH), ser testigo (PDT), me consta (NVI), atestiguar (otra traducción), testificar, declarar, estar seguro (otra traducción).
CONCLUSIÓN: ¿Cuál ha sido el trato, el cuidado el comportamiento, la actitud, la atención que hasta ahora les hemos brindado a nuestros pastores en sus momentos difíciles y crisis? ¿Mala, regular o buena? ¿Negativa o positiva? ¿Aceptable o inaceptable? ¿Aprobable o reprobable? ¿Estamos dispuesto a seguir con las buenas, aceptables, aprobables y positivas actitudes? ¿Estamos dispuestos a rectificar y corregir las malas, regulares, inaceptables, reprochables, reprobables y negativas actitudes? ¡Dios quiera que así sea! Por último recordemos que los pastores también son humanos: lloran, se desaniman, se le presentan crisis, dificultades, reciben malas noticias, experiencias amargas, equivocaciones, tienen necesidades y muchas cosa más que reflejan y les dejan ver lo humano que son. ¡AMEN QUE SÍ!
AUTOR: PrediCantor Garys Leandro –

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